A pesar de su riqueza, el ecosistema enfrenta varias amenazas que debemos reconocer y actuar para mitigar:
- Basuras y residuos sólidos, especialmente plásticos, arrastrados por el mar o dejados por visitantes.
- Contaminación silenciosa que afecta el suelo y el agua.
- Presión urbana, crecimiento desordenado y falta de conciencia ambiental.
Especies invasoras que alteran la fauna local y compiten con especies nativas.